BUENAS NOTICIAS PARA LA AUTOMOCIÓN REGIONAL

La publicación de diversos datos en fechas muy recientes demuestra la buena marcha del sector de la automoción en Castilla y León, consolidando con cifras el papel de liderazgo nacional que nuestra región juega en la fabricación de vehículos.

Por una parte, el incremento de la fabricación de vehículos en las fábricas que Renault tiene en Valladolid y Palencia supone un registro histórico para la marca y, por consiguiente, para la región. El pasado año se fabricaron 578.152 vehículos de los modelos Captur, Kadjar, Twizy y Megane (dos versiones), lo que ha permitido superar el récord de la empresa francesa, que databa del 2003, cuando se fabricaron 547.185 unidades. Por otro lado, esa tendencia alcista se refleja en la parte de componentes, ya que también la planta de motores de Valladolid también ha batido su propio récord al fabricar 1.571.593 unidades para la factoría de Renault en el mundo. El éxito de los modelos de Renault en el mercado y la confianza de la empresa en las factorías de Castilla y León ha sido clave en estos espectaculares datos. Además, otra empresa del grupo, Nissan, también ha sido noticia por la presentación en Francia de la nueva versión de su modelo Micra, dos de cuyos 3 motores se fabrican también en Valladolid.

En términos macroeconómicos también se han obtenido extraordinarios resultados, especialmente en lo relacionado con la exportación. Aunque no es nuevo el liderazgo absoluto de la automoción como sector exportador de la estructura económica regional, es importante resaltar cómo se mantiene en ese papel: entre enero y octubre de 2016 se exportaron 8.602 millones de euros en el capítulo de automoción, lo que supone un incremento de casi el 25% con respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se exportaron 6.904 millones. Las exportaciones de los capítulos relacionados con automoción (Vehículos, Motores y Componentes) suman más del 60% de lo exportado desde Castilla y León.

El sector automotriz revela así su buena salud actual y su fortaleza, así como su trayectoria ascendente. Desde el punto de vista de la estructura económica regional, esto supone no sólo grandes noticias en sí mismas, sino por los efectos de arrastre que implica entre las empresas suministradoras de componentes en los diferentes estadios de la cadena de valor, que ven así una oportunidad de seguir creciendo y creando empleo y riqueza en Castilla y León.